Continuamos inmersos en nuestro periplo por tierras catalanas. Si en la anterior publicación visitábamos tierras volcánicas, esta camiseta nos acercará a la comarca del Priorat, tierra de vinos. Viajaremos a una localidad que apenas cuenta con medio millar de habitantes, ronda esta cifra desde los años 80. Punto de inflexión también para el club al cual pertenece la camiseta que os vamos a presentar.
A mediados de los años 20, concretamente en el 1924, se fundaba la Unió Esportiva Porrera. El fútbol invadía a los jóvenes de una población en auge al establecerse en ella muchos de los trabajadores que bajo el proyecto de la construcción del canal Siurana-riudecanyes llegaron a Porrera. Aquellos muchachos deseaban competir y dejar la impronta de la población, en el mundo del deporte.
Inicios complicados, los escasos recursos de los que disponían les privaba de establecerse en un terreno de juego propio, los primeros encuentros se disputaban en la plaza del pueblo. No sería hasta el 1954 cuando se inauguró el que en la actualidad es todavía el terreno de juego. A las afueras de la población, entre “vinyes”, un camino estrecho nos lleva al Municipal de Porrera. Un campo de fútbol que conserva todavía la esencia, manteniendo aquella tierra en la que disputaban partidos en los años cincuenta. Tras navegar en busca de información sobre el club, el municipal de Porrera, es a día de hoy uno de los cinco campos de fútbol federado del Camp de Tarragona que mantiene esta superficie. Maspujols, Montbrió, Almoster y Bellvei son los otros cuatro restantes. Un cambio de superficie que a día de hoy es inviable dadas las características de la población, los recursos tan limitados de los que disponen para sobrevivir temporada tras temporada. Hace impensable hipotecarse en una enfrenta tan costosa.
Condición, la económica además de la imposibilidad de formar un equipo con garantías de competir durante toda la temporada fueron las causas que les llevaron a interrumpir la actividad en la década de los 80´s.
Interrupción que tocó fin el año 2003 cuando de nuevo los jóvenes de la población refundaron la entidad. Nutriéndose de efectivos tanto de Porrrea como de las poblaciones vecinas, consiguieron de nuevo pasar la arlequinada por los terrenos de juego del Camp de tarragona. Muchos de estos muchachos desempeñaban tanto funciones en la junta, como en el mismísimo terreno de juego. Múltiples fueron las iniciativas, ingeniosas muchas de ellas para acercar al público en sus partidos con el fin de obtener los recursos suficientes para subsistir y mantener la federación. Muchos de los comercios de la población aportan su granito de arena para que continúe el fútbol en el Municipal de Porrera. A día de hoy siguen vigentes muchas de elles, convertidas prácticamente en tradiciones de día de partido.
La vuelta a las competiciones no fue como se suele decir, un camino de rosas. Iniciaba la actividad en la 2003/2004, compitiendo en la antigua tercera territorial. Año tras año, los resultados obtenidos, les situaba en la zona baja de la tabla. Alguna temporada remontaban posiciones situándose en la mitad de la tabla al final del curso. La primera fecha a recordar es la victoria histórica en el derby Prioratí, aquella temporada el Falset Esportiu sucumbió ante la UE Porrera, el 7 de marzo del 2009, un a fecha para recordar.
No sé si estará registrado como récord negativo, ya sea del grupo o de la extinta categoría, el que cuajaron durante dos años, al no consumar ninguna victoria. Durante la 11/12 lograron solamente 4 triunfos, el último frente al Vimbodí el 4 de marzo del 2012, cosa que no volvió a suceder hasta la 14/15 donde lograron imponerse en seis partidos. Dos años de lucha en la que el fútbol no les regalaba alegría alguna.
Lejos de bajar los brazos “els porrerans” continuaron trabajando en la proyección de un club que habían rescatado de las cenizas. Convirtieron el municipal de Porrera en un verdadero templo. En él, se amenizan los partidos sorteando productos de la zona. Un notable volumen de socios, fieles y seguidores entre los que se encuentran los “Suporters U.E. Porrera” y el “Tiet Miquel”, un aficionado de pro que con su “desbrozadora arlequinada” en mano, pone el toque peculiar a esta afición. En los desplazamientos, suelen superiores en número incluso a las aficiones locales en muchos de las visitas a domicilio del equipo. Tanto el club como todos sus seguidores, en la temporada 15/16 disfrutaron del mayor hito en la historia de este club. Alcanzar la cifra de 46 puntos en los 24 partidos que se disputaron del grupo 24 de la tercera territorial, les permitía alcanzar la segunda plaza obteniendo un ascenso que se celebró por todo lo alto en la población, no faltó la “rua”.
Desde entonces, sin olvidarnos de las dificultades, el fútbol en Porrera se vive en la Tercera catalana (la segunda regional tras la reestructuración). Un enorme equipo humano, jugadores y aficionados procuran que el equipo de la población más pequeña de la provincia de Tarragona se codee con entidades en las que los presupuestos alcanzan enormes diferencias.
Los colores blanco y azul son los escogidos como santo y seña de la entidad. Las influencias no quedan claras, bien podrían deberse a alguna influencia del CE Sabadell FC o del C.F. Marçà, equipo ya desaparecido de la vecina población de la comarca.
Nuestra camiseta pertenece a la época anterior a la consecución del ascenso, la ubicaremos entre las complicadas temporadas y las previas a la consecución del ascenso a la tercera catalana. Hablamos de los años 2013-2015.
No podemos comenzar a describirla sin antes mencionar que es una prenda que cambia totalmente si la vemos sobre un lugar plano o en acción, portada por algún jugador de la UE Porrera. La marca pontevedresa, Zico España , afincada en Porriño. Creó un diseño en la que se define un contorno ajustado en los costados, permitiendo que la parte frontal se ciña al torso de los jugadores. Este contorno definido por un bordado en oro recorre imitando las curvas de la anatomía hasta llegar a la misma manga.
En el cuello de pico esos detalles en oro se acentúan por parte de dos “solapas” y un borde que recorre todo el contorno hasta llegar a tomar relevancia en el interior del mismo.
No nos olvidamos de los cuadros, el blanco para la parte superior izquierda, en él, el escudo de la entidad... No es que el nombre de la población venga del "porrò" que en él se aloja. Son tanto el “porrò” como el “raïm”, dos símbolos arraigados a la tierra, a la comarca del Priorat, cuyos vinos y su denominación de origen se expanden por la geografía, no solamente nacional, llegando al mercado europeo. Ambos detalles se encuentran separados por un balón de fútbol, todos sobre el fondo de una senyera que se interrumpe horizontalmente por una franja blanquiazul con las siglas del club U.E.P.
En el centro, sobre la unión de los cuadros, podemos observar el logo del patrocinador que acompañó a la entidad durante aquella etapa, Vilanova Fustes, una empresa dedicada a la carpintería y material para el bricolaje en Mora d’Ebre.
Las mangas, cortas en nuestra camiseta, alternan su color respecto al cuadro contiguo. Una única leyenda podemos encontrar en la izquierda, bordada en hilo blanco sobre cinco estrellas doradas la leyenda de Authentic Zico.
Agradecer al club y en especial al Pau Castellví toda la colaboración con Camisetas Alrequinadas.
Fotos: Faceboock U.E. Porrera
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